Morón: Denuncian una posible mala praxis en una clínica por la muerte de una mujer tras un parto

La mujer había ingresado a la clínica para dar a luz a su tercer hijo y falleció pocas horas después de dar a luz, en circunstancias sospechosas.

María Constanza Ramírez, de 37 años, murió el viernes 23 de enero en la clínica Agüero de Morón, tras haber ingresado por el parto de su tercer hijo. La familia considera que el deceso se habría producido por una supuesta mala praxis y pidió una investigación judicial.

Emilia, hermana de la fallecida, relató a Matanza Hoy que ella tenía una cesárea programada para el jueves 29 del mismo mes, pero tuvo que quedar internada una semana antes, luego de que un análisis rutinario arrojara que tenía una dilatación. En la guardia, comenzó el trabajo de parto.

“Según consta en la historia clínica, el bebe empezó con una bradicardia y tuvieron que hacerle una cesárea de urgencia. El padre entró un momento y dijo que no vio nada de eso, pero eso fue lo que le dijeron”, declaró la hermana de Constanza.

Fue así que la mujer fue llevada a una sala de parto, donde se procedió a realizar la cesárea. Más tarde, el personal médico le informó a la familia que el bebé nació en buenas condiciones, pero hubo complicaciones con la madre ya que “cuando abrieron, se encontraron con la placenta y la cortaron, entonces perdió mucha sangre y estaban tratando de estabilizarla”. Posteriormente, el nuevo parte sostuvo que la hemorragia continuaba y debían extraerle el útero.

“Dijeron que la iban a pasar a terapia intensiva, y cuando la sacan por un pasillo al ascensor, mi cuñado la vio a ella, inconsciente, intubada y con los ojos abiertos. Parecía muerta”, señaló Emilia.

Asimismo, un médico de terapia intensiva anunció a la familia que habían recibido a la paciente en un “cuadro terrible” y que no había forma de estabilizarla ya que no respondía al tratamiento.

Siete horas después del nacimiento de su hijo, Constanza falleció en esa sala a las 19:15 hs.

Tras enterarse de la triste noticia, Emilia relató que “pedimos explicaciones, a lo cual se presentó una médica cirujana que le dijo a mi cuñado que le habían cortado la placenta, pero después se desdijo. Tenemos unos videos donde se vio cómo ella se contradecía. Nos dieron explicaciones que no llegaron a satisfacer nuestras inquietudes porque mi hermana entró para dar a luz y terminó muerta”.

Fue así que la familia pidió tener acceso a la historia clínica y los responsables del establecimiento se negaron a dársela, por lo se dirigieron a la comisaría, donde hicieron la denuncia correspondiente. Luego intervino la fiscalía, que pidió retirar el cuerpo de allí, y solicitó contratar una cochería para conservarlo hasta obtener un turno para la autopsia.

 “Esto fue el viernes a la noche, y como nos mandaban de un lado a otro entre la comisaría y la fiscalía, pudimos sacar el cuerpo recién el sábado a la tarde y la autopsia se hizo domingo a la mañana”, declaró la hermana de la embarazada.

“La autopsia indica que ella murió por una hemorragia intraabdominal, pero se llevaron el cuerpo sin útero ni placenta, es decir, hicieron una autopsia a un cuerpo vacío porque no analizaron lo que debían”, agregó.

De esta forma, la fiscalía pidió intervenir la clínica para secuestrar el útero y la placenta, pero no estaban allí. Los responsables del establecimiento aseguraron haberlos enviado a un laboratorio, cuya dueña fue citada a declarar para explicar qué pasó con esas partes faltantes.

“Estamos a la espera del útero y la placenta porque creemos que la causa de muerte está ahí”, puntualizó Emilia y aclaró que “ella tenía un embarazo normal y llegó a término, no tenía ningún aviso de riesgo. Nos pareció sospechoso en cuanto a la mala atención, también en lo que dijeron y desdijeron, y por último por haber dicho que cuando abrieron se encontraron con la placenta, cuando todas las ecografías indican que la placenta está delante, donde ellos cortan para la cesárea y creemos que no tuvieron en cuenta eso”.

Sin embargo, el caso de Constanza no fue el único. Tras la difusión de lo sucedido, Emilia concluyó: “nos dicen que nos preparemos para no recibir justicia porque ese lugar tiene un montón de denuncias y casos similares. Se han contactado con nosotros unas cuantas mujeres que han perdido el bebé ahí”.

Además, dos médicos de la clínica Agüero fueron condenados el año pasado por la muerte de Mariela del Valle González, quien había acudido dos veces al lugar por un malestar y acabaron falleciendo ella y su bebé.

Fuente: APBAH

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